¡Hola!

Ya tengo luz verde por parte de Verkami para lanzar la campaña de financiación colectiva —crowdfunding, que dicen los angloparlantes y los modernos—, de mi libro. Poesía abaratada, así se llama. Vaya por delante que lo hago de este modo porque no es un libro cualquiera. Primero, porque colaboran en él ilustradores magníficos. Segundo, porque está escrito a mano. Eso es, escribas, nada de tecladitos de tacto suave con autocorrector incorporado. Quiero decir que se merece una impresión de calidad, no podía llevarlo a imprenta de cualquier manera. El tema sale por un ojo de la cara, me temo: papel grueso, a todo color, un buen tamaño, impresión offset… La cosa está difícil; hay que reunir un pastizal, pero vamos a intentarlo.

De momento, no digo nada más. Tengo muchas historias de cómo se forjó este proyecto y de cómo casi acaba en la basura. Iré compartiéndolas poco a poco.

(Sí, lo de ahí arriba viene a decir que voy a pedir pasta, pero había que disimularlo de algún modo).

¡Salud!