¡Hola! A finales de 2016 se me ofreció un reto. Escribir algo cada semana del 2017. Algo que para mí era como ponerle casillas al caballo del ajedrez. Yo lo hago al revés: cuando me sale escribir, escribo, sean las cinco de la madrugada o las doce de mediodía. Y si no sale, no lo fuerzo. Fue jodido, lo reconozco ahora que ya pasó. No me sobraba el tiempo y llegaba muchas veces con la lengua fuera y dudando de lo que había hecho. Salí airoso, pero eso no es lo cuenta: salí mejor escritor. Aunque hubiera textos olvidables del todo. Os animo, si es que sentís el gusanillo, a participar en los próximos años. Porque esto no para. Se acaba la edición del 18 y empieza la del 19. Y queremos, también, plasmar en papel una antología anual; empezando, claro, por los pioneros del 17. Es una edición preciosa. No es palabrería, la he visto entera con mis ojos cansados. Pero, para verla así de bien, hace falta un buen puñado de maldito parné. Puedes invertir en esto o comprar a última hora un regalo sin alma en Amazon. Ya, ya sé que el mundo está perdiendo el alma. Y que no tienes tiempo. Y que has colaborado ya para Poesía Abaratada —sólo quedan unas semanas más—. Y que el papel ha muerto. Sé lo que estás pensando. Sé también que no lo podremos parar. Pero mientras haya aire en los pulmones y tinta en las venas, compadres y comadres, a nosotros no nos van a cambiar.

https://www.verkami.com/locale/es/projects/21985-edicion-del-libro-antologia-los-52-golpes-de-2017